Es difícil definir qué tipo de soporte es lo que vuelve a una determinada pieza una obra de arte. Desde hace un par de décadas el lienzo ha dejado de concebirse como el único medio a través del cual puede crearse arte.
Basta pensar en lo que la tendencia póvera comprende, o bien, recordar los ready-made de Marcel Duchamp, que consistían en hacer uso de objetos normalmente no considerados artísticos para así realizar lo que hoy por hoy se define como arte.
Es en esta corriente de pensamiento en donde tienen cabida las creaciones deNathan Sawaya, el artista neoyorquino que se vale de piezas de Lego para crear sus esculturas de gran formato. Éstas comprenden desde obras de su autoría hasta recreaciones de icónicas piezas como El David, de Miguel Ángel; El Grito, de Edvard Munch; o La Joven de la perla, de Johannes Vermeer.