Menos es más. Una expresión que se escucha frecuentemente en el mundo de moda y un mantra para muchos, como nosotros, que nos gustan los diseños limpios atemporales y sencillos. Sin dejar de ser fieles a nuestras creencias y solo porque la colección de MSGM fue realmente excepcional, hoy podemos decir que aunque sea por un momento nuestra filosofía se inclina al más es más. Y nos gusta mucho.
La colección que Massimo Giorgetti envió a la pasarela durante Milan Fashion Week es una obra ruidosa, no solo por la música de Cassius que sonó durante el show, sino por el uso de colores saturados, capas y más capas de ropa, cinturones extra largos en colores como blanco y azul, en contraste con abrigos en rosa eléctrico, rojo, azul y naranja.
El look desenfadado y cuidadosamente descuidado le dio un sentido de espontaneidad y energía único. Una mezcla vibrante entre la sastrería tradicional y sportswear. Sin duda una colección que nos dejó queriendo ver más acerca de lo que el joven diseñador, quien también es el director creativo de Emilio Pucci, tiene que ofrecerle a la a veces demasiado tradicional capital italiana de la moda.
Less is more. An expression frequently heard in the fashion world and a mantra for many, like us, that like simple, timeless and clean designs. While remaining true to our beliefs and just because the MSGM collection was truly exceptional, we can say that, even for a moment, our philosophy leans towards more is more. And we like it.
The collection Massimo Giorgetti sent to the runway during Milan Fashion Week is a noisy work, and we are not only talking about the music by French band Cassius that sounded during the show, but by the use of saturated colors, layers and layers of clothes, extra-long belts in colors like white and blue, in contrast with coats in electric pink, red, blue and orange.
The carefree and carefully careless look gave a sense of spontaneity and unique energy: A vibrant mix of traditional tailoring and sportswear. It certainly was a collection that left us wanting more about the young designer, who happens to be also the creative director of Emilio Pucci, and what he has to offer to the, sometimes too traditional, Italian fashion capital.