Down Under the Manhattan Bridge Overpass o DUMBO para simplificar y acortar el nombre, es el barrio en Nueva York que en 2002 vio nacer a West Elm. La hoy famosa marca de decoración ha ayudado desde su creación a que sus clientes puedan expresar su estilo personal en casa.
Lleva intrínseco en su ADN el estilo de vida neoyorquino y quizás es por eso que sus diseños se adecuan sin mayor esfuerzo a la tendencia de espacios reducidos y vida urbana, algo que en un mundo cada vez mas concurrido se agradece mucho. West Elm ofrece soluciones, no solo para la decoración del hogar con diseños prácticos y vanguardistas, sino también para el medio ambiente y las comunidades.
Para esta temporada West Elm nos habla de apostarle a tonos cálidos como pueden ser el marrón, beige y café; contrastándolos con tonos grises que van desde los más tenues hasta los más intensos, para agregar carácter a cualquier espacio. Otra gran idea es darle un toque de frescura a sitios específicos como salas y baños con estampados en cojines y tapetes en tonos azul, rojo y mostaza; o aprovechar las maderas claras para un toque cálido en recamaras y cocina.
Algo que nos encanta además de las propuestas de la marca para esta temporada, es el hecho que tiene una grandiosa filosofía que se resume en tres “C”s: Choice, Community y Consciousness.
Así tenemos por una parte una gran oferta para poder darle una personalidad diferente a cada espacio de nuestra casa; un vinculo continuo con clientes y colaboradores, creando comunidades que se inspiran entre si y la que sin duda es la parte más interesante: una idea de negocio sustentable basada en practicas honestas que van desde productos certificados de comercio justo hasta una cadena de producción completamente transparente. Actualmente West Elm trabaja con más de 20 grupos de artesanos en 15 países que aseguran la preservación de las tradiciones y técnicas artesanales y busca activamente formas de mejorar sus vidas.
Down Under the Manhattan Bridge Overpass or DUMBO to simplify and shorten its name is a neighborhood in New York that gave birth to West Elm in 2002. The famous decoration brand has helped its customers since its inception to express their personal style at home.
West Elm carries within its DNA the New York lifestyle and perhaps that is why their designs adapt effortlessly to the new tendency of small spaces and urban life, something that in an increasingly busy world is much appreciated. West Elm offers solutions not only for home decoration with practical and modern designs, but also for the environment and communities.
This season their proposal is clear; betting on warm tones such as brown, beige and coffee and adding contrast with gray shades ranging from the most tenuous to the most intense, giving character to any space. Another great idea is to give a touch of freshness to specific places such as rooms and bathrooms with prints on cushions and rugs in shades of blue, red and mustard; or taking advantage of light woods for a warm touch in bedrooms and kitchen.
Something we love in addition to the proposals of the brand for this season is the fact that it has a great philosophy, summarized in three “C”s: Choice, Community and Consciousness.
So on one hand we have a great variety in products to give a different personality to each space of our house; a continuous link with customers and partners, creating communities that inspire each other and the one that certainly is the most interesting part: an idea of sustainable business based on honest practices ranging from certified fair trade products to a completely transparent supply chain. West Elm currently works with more than 20 artisan groups in 15 countries to ensure the preservation of the traditions and craftsmanship and is actively seeking ways to improve their lives.
